martes, 22 de junio de 2010

¿LA CONFIANZA DA ASCO?


Aquí dicen que la confianza da asco.
Así se refieren a que tienes que cuidar las formas con la gente que no conoces, pero que puedes decir lo que te plazca o no cuidar tus modales con alguien a quien quieres y alguien en quien tienes confianza. Que sean amigos, hermanos, padres…
En otras palabras, a lo crudo, “la confianza da asco” sencillamente quiere decir, que puedes faltar al respeto, ofender, sojuzgar, menospreciar, humillar a la gente en quien confías y no pasa nada, porque sabes que ellos te lo perdonarán, o que te lo tienen que perdonar.
Hasta Baltasar Gracián dice que “la confianza es la madre del descuido”. Pues yo no sé porque esta línea de pensamiento no llega a nuestro mundo, allí en África. Y como nuestra sociedad se sostiene con una manera de pensar totalmente inversa.
¿La confianza da asco?
Esto es el mundo al revés. ¿A dónde se ha visto que hay que hablar mal a los que quieres? Cuando son los que más te duele que estén ofendidos y dolidos por algo que tu hayas dicho o hecho. Esos blancos sólo cuidan sus modales con los desconocidos.¿Pero por qué nos tiene que importar alguien que no conocemos más que alguien que queremos?

La gente grita, planta, manipula, humilla y después se comporta como si no hubiese pasado nada. Con la excusa de que han tenido un mal día, son desagradables con los que están a su alrededor o cuando están enfadados, hablan mal a los otros o aguan la fiesta a todo el mundo.
Los europeos se engañan más y más pensando que tienen la llave del modernismo y del bienestar. Pero seguramente, no saben la historia de los clavos de aquel que clavaba un clavo cada vez que faltaba el respeto a alguien y lo quitaba cuando se disculpaba. Al final, estaba feliz porque no tenía clavos clavados, lo que quería decir que estaba en paz con todo el mundo, pero su pared estaba llena de agujeros. Esto es la marca que dejamos cuando ofendemos a la gente que queremos, a la gente en quien confiamos y que a cambio confían en nosotros.
Y las calles están llenas de gente que se piensa que sus paredes están vacías, que no tienen ningún clavo, pero no saben que los agujeros siguen allí, “béants”. Esto hace que son infelices. Después vamos buscando por doquier la fuente de nuestros males. No saben que la felicidad se basa en conceptos básicos como el respeto y la amabilidad.

En las tierras del Dahomey, el concepto es al revés. Se intenta suavizar el tono, la manera o la voz cuando se trata de alguien que uno quiere, de la gente en quien uno confía y a la gente que te quiere. Para nosotros, perder la compostura y las formas con una persona querida no es signo de confianza. Es signo de no confianza, de mala educación y de falta de respeto. No puedes tratar mal a alguien que quieres. Esto es lo que nos van inculcando desde pequeños.

Yo no quiero que la gente que quiero tenga que perdonarme nada. Sólo quiero que cada vez, me quiera más y que me tenga más confianza. Por esto cuido mis modales. Esto sí. Si el asco de tu confianza llega a mí, si me clavas el clavo, aunque después lo arranques de tu pared, la marca que queda después, me resulta imborrable. No tengo porque aceptar gente con mentalidad al revés, que me falta al respeto pensando que, como me tiene confianza, yo les voy a perdonar. Pues no. No, no quiero.Esto no es confianza.
Gente que falta al respeto y grita a sus padres “cállate” o “Eres idiota” o “Tú eres gili******” o “Pesado”…. Yo jamás he usado esas palabras para dirigirme a una amiga, a un hermano, ni a nadie en quien confío. No me gustaría ver la cortina de decepción que pasa por los ojos de mi amiga porque la acabo de humillar o de mi padre porque le he dicho “Gili******”. Los pocos agujeros que tengo,en mi pared, son por aquella tontería que confiere la edad y la convivencia.
La confianza da tanto asco, aquí, que si tuviéramos que dejar de lado todos los que abusan de la confianza en su sentido negativo, ahora mismo nadie tendría amigos. ¿Pero para qué queremos amigos si tienen inteligencia emocional cero?

La confianza es la seguridad que tienes en que las personas serán capaces de actuar de manera adecuada, sin libertad excesiva, sin abusar en sus actos, para seguir manteniendo un lazo de amor o de amistad. La confianza es un valor. La confianza no tiene porque dar asco. La confianza no da asco. La confianza tiene que llevar incrustado respeto, consideración, cariño, atención, aprecio… La confianza es inteligencia, inteligencia emocional. La confianza es singularidad.
Cuando quieres a alguien, no quieres que sufra por nada, ni quieres ofenderle o decirle algo que le hiera lo más mínimo posible. Y si dicen que la confianza da asco, es sólo para concienciarse y seguir haciendo lo que se les antoja por egoísmo y “melasudismo”, sin sentirse mal. Se excusan detrás de un lema para poder seguir actuando como les parezca.

La confianza no da asco. Es la gente que es asquerosa.

http://yaivi.blogspot.com/

7 comentarios:

Carol dijo...

Me has dejqado pensativa con este post y un poco triste, la verdad. Es cierto que a veces hacemos daño a los que más queremos porque pensamos que ellos nos lo perdonarán todo, aunque también tenemos otro dicho: "Tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe", o lo que es lo mismo, que si te portas mal una y otra vez con los demás, llegará un momento en que no te lo consientan.

Anónimo dijo...

DONDE HAY CONFIANZA DEBE EXISTIR CARIÑO Y AMOR ..ENTONCES NO DADA NUNCA ASCO

Anya dijo...

Otro dicho parecido: "das la mano y te cogen el brazo". Se usa cuando los demás abusan de tu ayuda, pero también sirve como excusa para no tender esa mano.

Demián dijo...

En general estoy de acuerdo en lo por ti escrito. De todos modos, no siempre,este dicho es la autorización para ser maleducado e irrespetuoso sino como justificación y asunción de un trato incorrecto. Es decir, una forma solapada de pedir disculpas.

Una vez más, me gustó tu post.

Mariaeles dijo...

Yaivi, has puesto el dedo en la llaga: la inteligencia emocional. Eso es lo que falta en Europa mires dónde mires... con honrosas excepciones.Y nadie se molesta en enseñárnoslo.
¡Gracias, sigue escribiendo!

GH dijo...

Totalmente de acuerdo.....como siempre. El esfuerzo es un valor descuidado. El esfuerzo de gustar cada dia mas a tus amigos/as, pareja, familiares.....en definitiva acompañarles. Es una cuestion de enamoramiento: hay los que consideran que el amor es una pasión repentina y el resto (muy minoritario) que sabemos que es un trabajo diario, un esfuerzo por mantener ese ambiente maravilloso cada día....que equivocados los que regalan al juguetón azar la construcción de las relaciones personales!
Bella, una vez más demuestras tu diferencia necesaria.....gracias! GH

IvanBalt dijo...

Haz acertado!!!!! bueno imperdible articulo me ha gustado mas que demasiado! este tema me hace acordar a tu otro post que tratabas el tema "respeto o libertad" y una pregunta con una demoledora logica "¿Pero por qué nos tiene que importar alguien que no conocemos más que alguien que queremos?" es que esto es irrefutable me gusta tu concepto de confianza :)