lunes, 14 de noviembre de 2011

LA NIÑA NEGRA QUE TENÍA UNA GRAN PREOCUPACIÓN.


Érase una vez, una niña negra que tenía una gran preocupación.
Érase una vez, una pequeña niña negra, que tenía una preocupación enorme.

Era negra  como las noches de lluvia, con unos ojos blancos color algodón y con unos labios marrones acaramelados que le daban un aire infantil y dulce. La niña negra, que siempre se reía dejando ver unos hoyuelos profundos y marcados, hoy estaba triste. No, no estaba triste. Estaba enfada. Sí. Hoy estaba enfadada.

La niña negra vivía feliz, con su padre y con su madre. No le bastó mucho tiempo para darse cuenta de que ella no era igual que los otros niños de su escuela. Y si no se daba cuenta, algunos de los niños más grandes, ya se encargaban de hacérselo saber. Se mofaban de ella y la empujaban por los pasillos de la escuela. Se reían de ella, gritándole: “¡Negra!” como si fuera algo muy malo u algo horrible...

Ella sabía que era negra. Era evidente. Siempre se lo había dicho su mamá y ella siempre lo había visto como algo normal, algo más. Pero muy rápidamente, la niña entendió que ser negra no era nada tan bueno, si era motivo de burla y de ofensa.

La niña negra estaba triste porque siempre se lo pasaba mal en la escuela. La hacían llorar y a veces tenía miedo. Ya desde un tiempo hacía aquí, la cosa había ido en aumento y ahora eran muchos los que se reían de ella.

Y la niña negra se puso a pensar…

Se dio cuenta de que mamá era blanca, blanca como sus amigas de la escuela, a los que nadie molestaba. Entonces eso era bueno. Mamá era blanca, blanca como la nieve, pero papá… Papá era negro, negro como ella. Y rabiosa, la niña negra se dio cuenta de que él era el problema. Si los niños vienen de los padres y tenían cosas de los padres, entonces esa era la ecuación. Ella tenía los ojos de mamá y también los hoyuelos de mamá y la abuela siempre le decía que caminaba igual que mamá. ¡Si! Todo era de mamá. Todo, menos el color. El color de la mofa, el color de la burla era de papa. La culpa era de papa.

Y la niña sentada, esperando a su madre se puso a llorar...
Allí la encontró su progenitora cuando la vino a buscar en la escuela. La niña se hundió más en su tristeza cuando vio a su madre y en un gesto que la caracterizaba y que también era de su madre, se apartó el pelo de la cara antes de tender sus dos brazos hacia ella. A la madre se le paró el corazón cuando vio a su niña llorando. “Otra vez los niños…” pensó. Ya lo había hablado con los maestros. Exasperada, se agachó a su lado y se le compungió el corazón cuando su hija la agarró con un dolor y con una tristeza enorme. La madre se dio cuenta de que había algo más…

-         ¿qué te pasa cariño? le preguntó, asustada.

Y la niña levantó su pena y sus ojos enrojecidos hacía su madre y con toda la inocencia del mundo le respondió:

-         ¿Por qué no me has escogido otro papa?
 
 
http://yaivi.blogspot.com/
 
 

6 comentarios:

Paty dijo...

Que triste,yo soy madre y madre de niña negra, y se me rompe el corazon en mil pedazos que ella renegara del color de su piel,o de sus raices negras, si negras como la noche , pero como la noche llena de estrellas.

Opiniones incorrectas dijo...

Esos niños necesitan una buena charla en su clase sobre las diferencias raciales y culturales. A mi mejor amiga también le tocaron bastante las narices durante su infancia por ser de otra religión, hasta algunos profesores. La nena tiene que entender que hay niños que no necesitan una excusa para molestar. Les da igual que seas negra, lleves gafas, aparato dental, seas gordita ó coja, simplemente son unos tocapelotas como hay en muchos sitios, por lo que necesitan una buena lección sobre tolerancia. Claro que los profesores deberían ocuparse de ello.

Antumi Toasijé dijo...

Desde el principio hay que enseñar a los niños a valorarse y lo que es el racismo. Si te descuidas empiezan a llamarse a sí mismos feos o malos por ser negros. El bombardeo de información que asocia lo blanco a lo "bueno" y lo "hermoso" y lo negro a lo contrario es abrumador. Escribí sobre esto en el diario Público, es terrible: http://blogs.publico.es/dominiopublico/1755/baltasares-pintados/

Pido a todo el mundo que apoye la campaña por los Baltasares negros, no es ninguna tontería:

http://www.petitiononline.com/Baltasar/petition.html

http://www.facebook.com/pages/No-m%C3%A1s-baltasares-pintados/159340034110196

Mi consejo para padres, educadores etc. es: contrarrestar activamente la desinformación. Es difícil pero se puede intentar ¿cómo?

1) Comprar juguetes afrocentrados: muñecos y muñecas negros etc.
2) Comprar libros y cuentos con protagonistas negros.
3) Comprar DVD etc. con protagonistas negros, entre otros recomiendo:
a) Kirikú
b)"The Proud Family"
c) El Pequeño Bill
4) Hablar abiertamente de racismo.
5) Relacionar a tu hijo/a con otros niños negros, por ejemplo acudiendo a eventos de la comunidad negra y procurar que no sea el único niño/a negro/a en la escuela, cambiarlo de escuela si hace falta.
6)Reforzar los comportamientos de autovaloración: "¡Mi pequeño gran hombre negro!" "¡Viva África!" son frases que mis hijos oyen casi a diario.
7) Resolver la pretendida falsa incompatibilidad entre ser negro/a y Español mediante el estudio de grandes personajes africano-españoles y el ejemplo de los actuales afroespañoles que destacan.
8) Recordar las raíces y si es posible viajar a África cuando nuestro hijo/a todavía es niño.

Puede ser que alguien piense que esto es excesivo o forzado, pero tengan en cuenta que la mayoría de los niños negros en España se relacionan la mayor parte del tiempo con un entorno eurocéntrico y de supremacía blanca implícita o explícita.

Anónimo dijo...

es terrible a lo que nos tenemos que enfrentar, y sobre todo, a lo que se tiene que enfrentar ellos, los más pequeños diferentes...Soy mamá de dos hijos del corazón, de China y...aunque todavía no ha habido grandes atentados contra sus rasgos distintos y aún nadie los ha llamado despectivamente "Chinos"...espero ese día...lo espero porque sé que llegará...y entonces...tendré que estar preparada para poder consolar, compartir, y mitigar el dolor que ellos sentirán...¿Cómo reparar el daño? Eso aún no lo sé...tengo que
seguir pensando y buscar ayuda, para cuando ese momento llegue...

http://hongmihijo.blogspot.com/
Mei

IvanBalt dijo...

Estoy de acuerdo con algunos comentarios hace falta mas dialogo familiar en estas circunstancias xq las actitudes empiezan en casa hay q dialogar muxo con los hijos decirles advertirles que siempre habra gente que se meta con ellos x cuestiones de color religion peso o si tienen gafas o cosas x el estilo xq los niños son reflejos de sus padres y habra alguno q transmita sus frustraciones a sus hijos y estos a su vez lo sacan en la escuela con lo demas compañeros y acertadamente un comentario dice hacer q se sientan concientes que son diferentes a los demas que sus origenes son otros pero no por eso hay q adoptar una actitud victimista ante ese hecho es mas al contrario hacer q se sientan orgullosos de sus raices!! eso del dvd Kirikú me ha gustao muxoooo tambien lo he visto!! ;)pd tambien da un poco de pena x la niña realmente pero confiemos q el dia de mañana esa niña este orgullosa de sus padres! :)

María Teresa Aláez dijo...

·Esa madre, viviendo en un mundo blanco, debería haber dado recursos a su hija para evitar que piense así y para que supiera defenderse ante los compañeros. No es el primer niño que sufre acoso-los acosadores dañan por que sí, por cualquier excusa, porque son psicópatas o sociópatas- y nuestra labor como padres es que nuestros hijos tengan la autoestima alta y, sobre todo, sentirse orgulloso de los suyos. Tanto que les dé igual lo que los demás digan o piensen. Esa madre no preparó a su familia y el padre tampoco. ¿Seguro que amaban a su hija? le hubieran evitado todo eso desde un principio. Saludos.