martes, 8 de marzo de 2011

MATER, MATRIS ...


Mi madre es adorable. Sí. Esa es la palabra.
Agradable, encantadora y coqueta. Con su nombre de flor y sentimientos mágicos, es especialista en dar, en dar y en dar. Entregada a los suyos, como sólo lo son los que han sufrido emocionalmente en la vida, cuida de nosotros y se preocupa por todos.
Mi madre es detallista, leal y fiel. Amante de la familia numerosa y hospitalaria, se adapta a todos los ambientes y disfruta cuando está rodeada de los suyos. Dadivosa hasta límites insospechados, aunque no del todo altruista porque a cambio, quiere que la quieran. ¿Quién no?

Y yo la miro.

Allí está, sentada en el sofá con su mano en la mejilla, medio dormida, después de afanarse en todas las tareas que, a nosotros, nos alivian.
Mamá. Romántica e imaginativa a la vez que realista, dibuja palabras con su sonrisa. Es todo contradicciones: emocional y mental; apasionada y práctica; indecisa y segura. Mi voz sólo la dibuja porque no digo nada. Y mis ojos la llaman susurrando: “Mamá…” Pero no me oye. Y la miro.
Veo a la niña que fue, con sus grandes ojos serios y tranquilos, profundos y llenos de ilusión, una niña sensible que juega con su vestido de flores, sola en su rincón. Cuchicheo del viento. Mamá. Una niña grande que sueña con una estabilidad emocional y que tiene miedo a que se la deje de querer y a que no se la necesite. Murmuro de brisa. Mamá. Una mujer conservadora que busca una euritmia en su vida doméstica y tener una vida tranquila, feliz y agradable.

Me gustaría decirle que me alegro mucho que fuera ella, la que me tocara como madre. Y que no hay nada más aliviante y reconfortante que tener una madre divertida y fuerte. Y ella lo es. Me gustaría tocarla, decirle que no se preocupe, que nosotros siempre estaremos aquí.
Mi madre es valiente y audaz. Fuerte emocionalmente, dice lo que piensa y de manera directa. Y ¿por qué no decirle? es posesiva, odia las improvisaciones porque escapan de su control. Terca y difícil de engañar, no hace nada que no quiera hacer. E incluos, a veces, es facilmente irascible. Y ella lo sabe. Pero es tan viva que muy rápidamente, las tormentas se olvidan dejando sitio a nuevas risas.

Seguridad de los Tauro, bravura de ellos y fuerza del signo de temperamento y tierra. Amor incondicional y fiel. Sufridora, cálida y cariñosa. Es imposible no quererla.

Y sonrío cuando la veo esconderse detrás de sus agujas, intentando tejer un mundo nuevo dentro de su caparazón en el que se encierra cuando sus valores morales y sus sensaciones le dan a entender que el mundo entero está en contra de ella.  Cautelosa y nada despilfarradora en su búsqueda de la armonía que reside en su capacidad de atesorar.
Mamá. Honrada, noble y sincera. Afectuosa, tierna y atenta. Se me ocurren muchos adjetivos. Muchos más. Después de todo, es mi madre.

Y la miro. Ella no lo sabe, pero sé cuando intenta borrar este aire de melancolía que a veces le pasa por la mirada. Melancolía de los tiempos pasados, melancolía de las recapitulaciones, melancolía de las realidades. Melancolías de las almas sensibles.

Mi madre es genial. Y además generosa. Generosa porque yo no soy su hija, pero es como si lo fuera. Y el merito también es de ella.

Mi madre es adoptiva.
Mi madre es adorable.

http://yaivi.blogspot.com/

6 comentarios:

Paty dijo...

Me ha encantado leer tu entrada, de echo se me saltan las lagrimas.Espero que mis princesas piensen que soy una buena madre, yo tambien soy madre adoptiva.Gracias
Paty

yaivi dijo...

Paty!
Estoy segura de que tus hijos pensan y pensaran lo mismo. A veces no nos decimos las cosas que pensamos pero están allí. Cuantos años tienen tus hijos ?

Parroteta dijo...

Jo...que bonito!! Yo soy madre, adoptiva y no adoptiva, y me sentiria muy, muy feliz de que, cualquiera de mis hijas, escribiera la mitad de todo esto....Gracias!!! Eso si, espero que alguna lo piense...jiji..
Pili

Aurora dijo...

Buf... Sé que estos días ando especialmente nerviosa y sensible, pero NECESITABA leer algo así. De verdad.
Muchas gracias!
Me encanta leerte, por cierto, aunque siempre entro de puntillas y sin hacer mucho ruído...

Anónimo dijo...

gracias Bella.....es precioso
GH

IvanBalt dijo...

WoW!!!! QUE BONITOOOOOOOOOO tienes una inmensa suerte que la vida te halla premiado con una Mama como ella :) todo lo q cuentas de ella es como si fuera tu verdadera Mama! :) me alegro x ti!